A la altura de las circunstancias.

Anda la educación “on fire” últimamente. Aquí, aquíaquí

Ante los profundos recortes en el ámbito educativo (ya hablamos en su día de las podas a la investigación) parece que por fin se va recuperando el diálogo entre Wert y la CRUE. Además, por fin entran en juego las CCAA, que hacen de su capa un sayo a la hora de fijar las tasas, entre otras el Gobierno Vasco, que no las tocará más allá del IPC. En todo caso, #nuevoridículodelgobierno. Una cosa está clara: el modelo de Universidad del Estado del Bienestar está en juego. En un contexto de claro retroceso asesinato social, cabe preguntarse quién está a la altura de las circunstancias y quién no lo está.

Saltando al campo de juego de la universidad privada, el pasado miércoles charlábamos sobre la identidad y la misión de Deusto. Un análisis sobre nuestra cultura y ese “quiénes somos” en el que nos apoyamos para caminar. Comentábamos que dos de los rasgos más arraigados en la obra liderada por los jesuitas son la solidaridad y la justicia. Ando sin duda re-descubriendo el proyecto de Deusto.

En este sentido, una de las urgencias compartidas era la de facilitar el acceso a la educación a familias con problemas económicos. La crisis no debe ser una excusa, si no un acicate para fomentar las iniciativas y las ayudas encaminadas a que personas con talento dispongan de medios para continuar estudiando y progresando. Necesitamos de titanes a la caza de financiación y ayudas. 

Con la ayuda de Itxaso me he dado una vuelta por la red para ver qué ofrece la Universidad. Y vemos:

Pero hay otro tema candente para completar el ciclo pre-post universitario. Si el acceso al estudio es crítico, igualmente lo es cómo ayudamos al recién licenciado a incorporarse al mercado de trabajo. Nuestra responsabilidad como Universidad, evidentemente, no finaliza con la entrega del título.

No lo tenemos fácil. Estamos sufriendo la barbarie de una generación de líderes pésima. A su falta de ética y valores reflejada en el modelo económico del ladrillo #españistanibabien, debemos hacerles también responsables de un abandono a la juventud: su modelo nos han dejado en la estacada con una tasa de paro juvenil cercana al 50%. #quealguienmeexpliquecómollegamosaesto.

Por eso hoy es más crítico que nunca tender nuevos puentes entre lo académico y lo laboral (Iñigo hablaba de esto hace unos días). Sin esperar al último año de grado. El reto es enganchar a los jóvenes desde mucho antes. Crear en el estudiante un imaginario de futuro de #en-quién-quiero-convertirme es fundamental en un colectivo que suele andar un tanto despistado durante la carrera (al menos ése fue mi caso).

Centrando el tiro, la sorpresa también ha sido positiva en este ámbito. Hay oferta. Algunos ejemplos:

Y seguro que me dejo algunas.

Como país, la clase política ha hablado. Claro y meridiano. Siguen dando de comer a los mismos (al loro con esto)y se olvidaron de rescatar personas. Se olvidaron de rescatar a las personas del futuro; al estudiante. Viendo cómo culebrea la Universidad para crear un futuro, no me cabe duda de quién sí y quién no está a la altura de las circunstancias.

* La que nos espera… –> Clap your hands

* Actualización 19 de junio – Desde Deusto Alumni nos recuerdan la existencia de las “Becas Deusto Alumni”, que se apoyan en el colectivo de antiguos alumnos para dinamizar becas de estudios. Como alumni, puedes colaborar. Un granito de arena para ayudar a estudiantes sin recursos económicos. ¿Te animas? ¡Pincha aquí!

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