Sobre dietas y adelgazamiento.

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Hace unos días leía una frase lapidaria. Una frase que me dejó tocado, porque dice demasiado sobre los tiempos que corren. La frase y las ideas del artículo “Are your costs too low?” provocaron el #silenciorecurrente que paso a describiros a continuación.

“Any fool can cut costs, and most do”

Nadie es ajeno a que, de un tiempo a esta parte, hemos ido interiorizando una serie de conceptos ligados al adelgazamiento: la reducción de costes, la eliminación de lo superfluo, los recortes que aseguran la sostenibilidad, la eficiencia operativa o incluso las dichosas limosnas. Un ejemplo; este año se invertirá en universidades un 21% menos que en 2009. Y las calles aún no están ardiendo. ¿Qué sucede? ¿Nos hemos quedado sin ideas?

Si echamos mano de la definición de estrategia empresarial en wikipedia (por cierto, ¿ya has donado?) ésta se define como “la búsqueda deliberada de un plan de acción que desarrolle la ventaja competitiva de una empresa y la acentúe, de forma que ésta logre crecer y expandir su mercado reduciendo la competencia”. Pensemos en nuestro modelo de país, en nuestro proyecto organizativo o nuestro perfil profesional; siguiendo una severa dieta de adelgazamiento, ¿qué futuro nos espera? 

De hecho, el hablar de una estrategia de reducción de costes o recortes, ¿no es una contradicción en sí misma? Es la estrategia, y no la estructura de costes la que determina la sostenibilidad o el fracaso de nuestro proyecto. Definida una estrategia que nos posiciona y nos diferencia, el modelo de costes no es más que la consecuencia de poner dicha estrategia en marcha. O debiera serlo.

Aun así, parece que el contexto actual es escenario perfecto para que surja el debate de la sobre-dimensión de costes. Apostando por el adelgazamiento, ¿no estaremos en realidad cuestionando el actual modelo de negocio? ¿No estará subyaciendo un nuevo marco estratégico que se erige contra la estrategia vigente?

Atacar la estructura de costes per sé, ¿no es certificar el debilitamiento del pensamiento estratégico?

Defiendo que la atención de los líderes debiera estar centrada en la diferenciación, y no tanto en la eficiencia operativa y de costes. Dime qué propones y, si vamos a por ello, establezcamos una política para contener los costes. Forzosamente, lo primero precede a lo segundo. Cuando sucede lo contrario, suele ser síntoma del debilitamiento de la estrategia, camuflando una incapacidad de diferenciarnos en el mercado.

When budgets are cut, weak leaders cut people to make up the shortfall. Strong leaders ask the people to help figure out a better solution | Simon Sinek

Hace unos meses hablábamos sobre los indicadores del fracaso estratégico en las organizaciones. Curiosamente, los Consejos de Dirección dedican 9 veces más tiempo a la reducción de costes y a la eficiencia operativa que al pensamiento estratégico sobre el negocio que aumente los ingresos. Tiempo perdido para mejorar nuestra salud futura, en términos de innovación, diferenciación, liderazgoSi la función del management consistiera únicamente en adelgazar la estructura de costes, ¿no llegaría un momento en el que no quedaría nada por adelgazar? Ojo, no estoy diciendo que no sea importante, pero ¿no debería estar supeditado al pensamiento estratégico sobre un futuro mejor? ¿No habremos perdido la capacidad de innovar, de sorprender, de crecer en nuestro negocio? ¿No será que no somos capaces de inspirar

¿No nos estará matando esta dichosa dieta?  

La fotografía es de Karramarro. Se trata de una antigua fábrica a las orillas de la ría, cerca de Erandio. Cada vez que paso por allí pienso en lo que seguro sucedió entre esas paredes.

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